Podría pensarse que, por lo menos hablando de negocios, un emprendedor va a crecer hasta donde el mercado llegue a la saturación, o hasta que llegue a un límite donde ya no pueda atender más clientes.
En mi experiencia formando agentes de seguros he notado que el límite está mucho antes de llegar a esas barreras.
Las personas crecen hasta donde sus miedos lo permiten.
Las conversaciones internas, que son las más importantes, van más o menos de la siguiente manera en un inicio:
- ¿Darme de alta en Hacienda? No, porque luego el gobierno me va a estar vigilando. Además, no me gusta trabajar arduamente para que otros lo disfruten.
- ¿Sacar anuncios en redes sociales? No porque me van a escribir muchas personas que en realidad no van a comprar y no tengo tiempo de atender a tantos.
- ¿Hablar en público? No porque me van a criticar, además qué tal si me equivoco y todos se dan cuenta.
- ¿Hablar por teléfono con una persona de mucho dinero? No quiero "quemar” esa oportunidad, mejor después, cuando ya esté más consolidado mi negocio.
- ¿Volver a llamar a esa persona que no me quiso comprar el mes pasado? No, lo más seguro es que ahora tampoco quiera lo que yo vendo.
Al superar los miedos iniciales, tu negocio irá creciendo y aparecerán nuevos miedos, es un proceso sin fin.
- ¿Contratar personal? No, porque van a cometer errores y no me quiero hacer responsable de ellos. Además me tengo que hacer responsable de cubrir su sueldo, todos los meses, sin fallar.
- ¿Crear una persona moral? No, son muchos requisitos.
- ¿Darle un auto a mi asistente? No porque lo va a chocar, va a usar la gasolina para sus necesidades personales, lo van a multar y no me lo va a decir.
- ¿Normalmente culpas a alguien de tu falta de resultados? Es posible que estés enmascarando un miedo personal y que no quieres hacerte responsable de la situación.
Todas estas conversaciones internas terminan matando el negocio mucho antes de lo que "el mercado” o "la situación económica mundial” le pongan límite a tus ventas.
Entonces, si los miedos son el principal freno al crecimiento de mi negocio, ¿Qué hacer?
Existen numerosos estudios al respecto. Te comparto 4 poderosas herramientas que te ayudarán a enfrentar y superar tus miedos:
- Avanza poco a poco, hasta que domines lo que te causa miedo. Piensa en un niño que antes de aprender a caminar, gatea.
- Identifica las causas reales de tus miedos. Para esto te puede ayudar explicarle a alguien de tu confianza o a un psicólogo lo que estás pasando.
- Piensa en los beneficios que obtendrás cuando superes tu miedo. Esto realmente ayuda.
- Permite que te ayuden. Puede ser tu coach, tu pareja, algún amigo cercano. No te guardes lo que estás sintiendo.
Cuando por fin logras superar tus miedos, ¡tienes que trabajar con los miedos de tus colaboradores! Interesante, ¿No?
Escríbenos en los comentarios.
Eduardo Gutiérrez Arredondo
CEO de Grupo GyA