En la mitología griega, Pigmaleón era un escultor que talló una hermosa estatua con tanta habilidad que parecía que estaba viva.
Pigmaleón a pesar de ser un habilidoso y reconocido escultor en la isla de Chipre, no tenía una pareja con quien compartir su vida, y al terminar su estatua, se enamoró perdidamente de ella.
Su deseo tan intenso de tenerla como compañera hizo que le suplicara a la diosa Afrodita. La diosa escuchó a Pigmaleón y mientras él dormía, la estatua cobró vida, recibiendo el nombre de Galatea. Según la historia, Pigmaleón y Galatea fueron muy felices y llegaron a tener varios hijos.
En tiempos actuales, la historia de Pigmaleón se usa de diferentes formas:
- Una persona puede lograr lo que se propone simplemente porque cree que puede conseguirlo.
- Las expectativas y previsiones de los profesores sobre sus alumnos determinan el comportamiento y resultados de sus alumnos.
- Una profecía auto cumplida es una expectativa que incita a las personas a actuar de cierta forma, de manera que al final la profecía se cumple.
A esto le llamamos efecto Pigmaleón, o efecto Rosenthal. La historia de Pigmaleón siempre me gustó desde muy joven, la primera vez que la escuché fue en una capacitación que mi padre le dio a un grupo de agentes de seguros.
Desde antes de escuchar la historia, la había vivido en carne propia. Cuando yo tenía cuatro o cinco años, mi madre estaba conversando con una amiga suya. Yo estaba jugando en el suelo (creo que con un carrito) y haciendo como que no escuchaba la conversación, pero poniendo mucha atención, como siempre hacen los niños. La frase que usó mi madre fue algo así como: "Liliana (mi hermana) siempre capta todo rápidamente, pero Eduardo es muy dedicado, pone todo su esfuerzo en aprender algo hasta que lo logra”.
Ningún consejo o regaño tuvo tanta influencia en mi vida. Cada vez que me topaba con algo que me daba mucho trabajo comprender o superar, recordaba las palabras de mi madre y no abandonaba la tarea hasta tener éxito. En toda mi vida escolar, siempre estuve entre los tres mejores estudiantes en los grupos en los que estaba.
No es necesario criticar o reprochar nada a nadie, la gente ya de por sí está llena de inseguridades y complejos. No necesitan que les pongas una piedra más en el zapato.
Por eso, si quieres ser mejor, confía en ti mismo y piensa que vas a tener éxito en todo lo que te propongas.
Si quieres ayudar a otra persona a mejorar, dile lo que te gusta de ella o lo que admiras de ella. Sus resultados hablarán por si mismos.
Eduardo Gutiérrez Arredondo
Eduardo Gutiérrez Arredondo es CEO de Grupo GyA, Empresa Líder con más de 27 años formando campeones de alto nivel en la Industria de Seguros y Fianzas con presencia en Mérida, Veracruz y Cd. Juárez Chihuahua.
Entusiasta Miembro del Club Rotario Mérida y Galardonado como "Yucateco Distinguido 2023"